(2011 ENERO 11 MARTES) Este es el nombre de las cuatro semanas que durante el año escolar los educadores tienen, en períodos de una semana cada vez; lapso este, dedicado a algo así como a preparar las clases que deben dictar durante el tiempo que transcurre entre una y otra. Recuerdo que en los años de mi lejana infancia en el escritorio del maestro, (en esa época habían muchos maestros, no los eran todos, pero si casi todos) reposaba un libro grande en cuanto a largo y ancho y no tanto lo grueso en donde estaban programadas las clases y el maestro anotaba allí cada clase que dictaba. Ahora el asunto ha cambiado y son los educadores los que programan las clases. Ya no todo es tan rígido como antes. Los días de asueto son muchos y en los días de clase las horas son menos. En los diciembres de antes, vacaciones desde el 23 de diciembre hasta el 6 de Enero, en estas épocas son casi un mes de vacaciones. En Semana Santa se estudiaba hasta el miércoles santo y el lunes de pascua volvíamos a estudiar, ahora son 11 días de vacaciones. No había celebraciones, ni días de nada todo el tiempo a estudiar, hasta los sábados por la mañana. Por eso la educación de ahora le debe muchas horas de clase a la de hace unos años, padres, alumnos y sociedad estamos pagando ese precio con baja calidad en la educación, cuando se redujo la jornada de estudio a una y en ella menos horas de estudio, se debió aumentar los días de clase para compensar las horas perdidas. Ese cambio fue perjudicial para la educación en Colombia.
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