(2012 AGOSTO 21 MARTES) Como prometiendo nadie se ha quebrado y los alcaldes, gobernadores y presidentes saben que nadie les va a cobrar sus incumplimientos por mala memoria y falta de instrumentos de la comunidad. En los municipios que es el caso concreto que nos ocupa, se van quedando unos puntos de esos planes por realizar, bien sea por empezar o terminar. Todo lo pendiente debería ser el piso o la plataforma de lanzamiento de la siguiente administración, para evitar que alcaldes ilusionistas nos vengan a prometer el oro y el moro y al final nos salgan con un chorro de babas. De esa forma también frenamos a los promeseros y desde la campaña un candidato a la alcaldía conocerá a qué, de lo pendiente tendrá que ponerle atención y entre más "vieja" sea la incumplida promesa, más rápido tendría que acometerla o terminarla.
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