(2011 SEPTIEMBRE 27 MARTES) En todas las elecciones estás allí, entre los telones, esperando que el respetable público te llame a escena, pero nada que sales. Los otros actores, los candidatos, perversamente no te incluyen en el reparto y tal parece que en el programa de la función tampoco apareces por ningún lado, no eres mencionable. Eres una opción salvadora cuando el electorado considere que los candidatos "son mas malos que Caín borracho", pero elección tras elección no saltas al escenario como el galán (el guapo, el tipo. la caballería). Solo unos pocos se acuerdan de tí, pero esos pocos no tienen la fuerza que deberían tener y de pronto su clamor es solo un murmullo "en el gallinero", al que el grueso de los asistentes hace callar con un "shit, mal educados". Lo cierto es que alli estás, como un gigantesco oso gris en período de hibernación, para darle la mano a la pisoteada democracia y para pisotear a tanto politiquero y partidos familiares de garaje que hay en Colombia. Algún día la gente cambiará candidatos con tu ayuda y ojalá ese día no esté muy lejos, para poder verlo, si es que a este mundo no se le vence la patente de vago, colgado de la nada, en la inmensidad del universo el 22 de Diciembre del 2012.
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