AUDITORÍA A ACTAS DE EMPALME (5171)

(2012 FEBRERO 14 MARTES) Por lo expresado por algunas personas que participaron en las llamadas comisiones de empalme podemos deducir que éstas no fueron como muy ortodoxas que digamos. En la empresa privada estos empalmes son muy serios. Llama la atención que el empalme, que lo llamo así por la forma como lo bautizaron, fue hecho en el Club Campestre, en otras palabras lejos de la cancha propia que estaba situada en el Centro Administrativo Municipal. Tal parece que las personas que hacían la entrega se limitaron a realizar una exposición ante los encargados de recibir a esa empresa llamada Municipio de Palmira. De esta conferencia los entrantes dedujeron que todo marchaba sobre ruedas y muy seguramente los salientes traían el acta ya elaborada y firmada para que los entrantes la signaran. En la empresa privada este procedimiento es de auditaje en donde se tienen que demostrar que todos los activos están relacionados por su valor en el mercado al día de la firma. Reservas, contratos, mercancías, bancos, caja, bienes muebles e inmuebles, todo se relaciona y aunque era el paso de una administración a otra dentro del mismo partido, ni la administración saliente, ni la entrante, ni el Partido de la U., son los dueños del Municipio, por esta razón se debieron cumplir todas las normas de auditoría generalmente aceptadas e informar a los dueños del Municipio (los ciudadanos) el estado real en el que se recibió el ente territorial y poner a disposión de toda la comunidad los documentos que hacen parte de una administración como su acta final de entrega debidamente finiquitada con la participación de los entes de control y como consecuencia lógica, ésta se convierte en el documento inicial de una nueva administración. Si se hizo algo distinto, se convierte en algo que podemos calificar como poco serio.